¿La soja es mala? Es una pregunta que se formulan muchas personas. Lo que sí parece claro es que la soja tiene mala fama y en este artículo te voy a desvelar si esta fama es merecida o no, analizando distintos argumentos que pesan sobre esta legumbre.
Una de las cosas más escuchadas sobre la soja es que desforesta el Amazonas, a veces incluso se echa la culpa a los veganos de esto por nuestro consumo de este alimento. También existe la creencia de que puede ser causante de cáncer de mama. Y también es denostada como fuente de proteínas, ya que al ser vegetal, se considera que no puede tener la misma calidad que la carne.
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¿La soja es mala o son mitos injustificados?
Vamos paso por paso analizando cada argumento anterior. En el caso de la deforestación del Amazonas, según datos de Igualdad Animal, hay que saber que el 77% de la soja se usa como pienso para animales de consumo y que la ganadería industrial es responsable de más del 80% de la deforestación en Brasil. Solo el 19,2 % de la soja que se produce va directamente al consumo humano.
En cuanto al cáncer de mama, según Vegan Health, la evidencia muestra que la soja puede reducir el riesgo de cáncer de mama. También hay evidencia de que puede reducir el riesgo de cáncer de próstata y enfermedades cardíacas (al reducir el colesterol LDL)
Si se piensa en el valor nutricional de la soja, es fuente de proteínas completas, es decir contiene todos los aminoácidos esenciales y en cantidades suficientes. Es más, su contenido proteico es mayor que el de la carne. La soja es una gran alimento desde el punto de vista nutricional.
¿Qué pasa con la soja transgénica?
Es la soja que se modifica por ingeniería genética para ser más resistente herbicidas y plagas.
“De conformidad con la Directiva 98/95/CE del Consejo, el etiquetado de las variedades de semillas modificadas genéticamente es obligatorio“. Es decir que la Unión Europa obliga a informar de este hecho. Sin embargo, de acuerdo con las normas generales de la UE en materia de etiquetado, el Reglamento no exige el etiquetado de productos como la carne, la leche o los huevos procedentes de animales alimentados con alimentos modificados genéticamente o tratados con medicamentos modificados genéticamente.
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