Si te preguntan si sabes que es un disco y un tubo de verduras, lo normal es que no tengas ni idea de que te hablan. ¿Cómo te quedas si te contamos que el Parlamento Europeo vota en dos semanas las enmiendas que obligarían a etiquetar las hamburguesas veganas como discos de verduras y las salchichas veganas como tubos de verduras? Suena a broma, pero parece que en la Unión Europea tienen tiempo para este tipo de asuntos y nos preguntamos por qué es así. La votación final tendrá lugar en la semana que comienza el 19 de octubre.
Los/as eurodiputados/as votarán sobre las enmiendas 165 y 171. La primera busca restringir que los productos de origen vegetal usen nombres asociados a productos cárnicos. Si se convierte en ley, esto podría obligar a que las hamburguesas vegetales tuvieran que adoptar nuevos nombres como “discos de verduras” y las salchichas hechas con vegetales como “tubos de verduras”. En cuanto a la segunda, busca extender las restricciones ya existentes en términos relacionados con los lácteos de origen animal. Denominaciones como “leche de soja” y “queso vegano” ya están prohibidas en la UE, pero la propuesta quiere ir más allá y llegar a otros términos descriptivos como “estilo yogur” y “alternativa al queso” en las alternativas vegetales a los lácteos. Oficialmente el objetivo de estas enmiendas es evitar confusión en los/as consumidores/as.
“Existe evidencia de que los consumidores no están confundidos con el etiquetado actual de los productos vegetales. Sin embargo, la UE quiere utilizar esta falsa confusión para llevar a cabo una prohibición que limita la revolución que está viviendo el mercado de la proteína vegetal. Más de 100.000 personas se han mostrado en contra de esta prohibición porque va en contra de las necesidades de los consumidores –firmando esta petición– y pone trabas a la necesaria transformación de nuestro sistema alimentario”, advierte Cristina Rodrigo, directora de ProVeg España.
El hecho es que ocho de cada diez consumidores sabe diferenciar entre productos cárnicos y lácteos y sus alternativas vegetales, según un estudio “Nomenclatura de los alimentos de origen vegetal”, llevado a cabo por ProVeg, Upfield, Heura y Oatly, entre más de 3.000 españoles. Sin embargo, cerca del 50 % de la población desconoce que el Parlamento Europeo quiere votar próximamente en contra de un etiquetado justo de los productos vegetales. Mientras, el 93 % de los ciudadanos valoran positivamente el acceso a nuevas alternativas vegetales en los supermercados.
El primer objetivo de la European Alliance for Plant Based Foods (Alianza Europea para Alimentos a Base de Plantas) es animar a los/as eurodiputados/as a adoptar una visión de sentido común con respecto a las dos enmiendas citadas. Esta alianza, formada por ProVeg, Oatly, Beyond Meat, Heura, GFI, Upfield y Nestlé, pretende a ayudar a construir un sistema alimentario sostenible en el que los alimentos de origen vegetal ejerzan un papel de liderazgo, particularmente en las políticas de la Unión Europea.
Como indica Proveg, el uso de los términos “hamburguesa”, “salchicha” y “alternativa al queso” en productos sin carne y sin lácteos cumple una función importante a la hora de comunicar las características que los consumidores buscan en los comercios, especialmente en términos de sabor y textura.
“Prohibir el uso de estos términos resultaría costoso para toda la industria alimentaria, con consecuencias sustanciales para los fabricantes, minoristas y establecimientos de servicios de alimentos. Las propuestas también podrían restringir innecesariamente los cambios ambientales positivos creados por el mercado de productos basados en plantas, uno de los sectores más innovadores y de más rápido crecimiento en la industria alimentaria actual”, explica Cristina Rodrigo.
Entre los posibles impactos de la prohibición propuesta estarían: la necesidad de un reetiquetado bajo el nuevo marco legal; sería difícil un marco de denominación alternativo único para todos en los diferentes Estados miembros de la UE; se requeriría un cambio de marca para garantizar que los productos puedan atraer y retener a los/as consumidores/as que están familiarizados con el etiquetado, la marca y la terminología anteriores y se necesitarían nuevas campañas para garantizar que los/as consumidores/as comprendan la funcionalidad homogénea de productos a los que ya no se les permitirá utilizar sus
nombres y descripciones actuales.
Foto | Madrid Vegano
1 comentario en “¿Sabes qué es un disco y un tubo de verduras?”
Son absurdos. Que más les dará.